¿Cómo se definen las cicatrices?

Una cicatriz puede desarrollarse en la piel a partir de cualquier trauma que se le produzca, después de una cirugía perfectamente realizada, como secuela de acné fuerte e incluso después de una alergia de contacto, como por ejemplo al esparadrapo, vendajes, vendas, fajas de presión, etc.

En algunos casos la cicatriz se torna roja y se inflama (hipertrofia), o crece en todas las direcciones, produciendo un queloide, y se considera que puede afectar hasta un 15% de la población.

Varios tratamientos han sido empleados en el cuidado de estas lesiones como cirugía, crioterapia, radiocirugía, electrocauterización, dermoabrasión, inyecciones de esteroides y las últimas técnicas de radioterapia postquirúrgica combinadas con presión permanente.

La cirugía láser pulsado ha demostrado buenos resultados en el tratamiento de estas lesiones, disminuyendo el enrojecimiento y mejorando la textura de la piel. Solo son necesarias una o dos sesiones normalmente, pero en algunos casos se requiere de más intervenciones. El intervalo entre cada sesión varía entre 6 y 8 semanas. La costra aparece inmediatamente después del tratamiento y puede dejar un tono púrpura u oscuro por 1 o 2 semanas.

La investigación láser en cicatrices sugiere que estos tratamientos son seguros y con pocos efectos secundarios, pero no hay garantía absoluta en retirar toda la lesión. Puede haber riesgos como manchas claras u oscuras, infección, ardor persistente por 2 semanas o incluso procesos cicatriciales más fuertes que el tratado en el caso de los queloides y dependiendo su ubicación y tensión en la piel.

¿Qué tratamiento existe para la eliminación de cicatrices?

Como apoyo a los tratamientos convencionales de cicatrices es la aplicación láser de diferentes tipos de luz que ayudan a producir colágeno intradérmico o a desinflamar la cicatriz y disminuir la fibrosis. Aparte de este, también se emplea la cirugía convencional, cirugía reconstructiva, microdermoabrasión, las exfoliaciones químicas, las inyecciones de rellenos permanentes o semipermanentes y la inyección de grasa. Además, existen productos en cremas o geles y placas de presión que ayudan, junto con infiltraciones de corticoides o antitumorales, a aplanar la superficie levantada de la cicatriz y microinjertos en lesiones producidas por acné severo en la cara y el cuerpo, rellenando los huecos dejados por el acné.